La pandemia del coronavirus cambió el ritmo de vida de la mayoría de habitantes del planeta y uno de los sectores afectados es la educación.
Con la paralización de las actividades académicas presenciales y la implementación de medios virtuales como correos, mensajes de whatsapp y plataformas como Zoom, Teams o Skype, llegó el momento de utilizar las clases en línea.
En el 2019 se hablaba de las tendencias educativas respecto a la educación[1], que hace referencia al Aprendizaje Basado en Proyectos ABP, Microlearning, Visual Thinkin, realidad virtual y aumentada, entre otras. Para algunos quizá sean muy conocidas, para otro sector quizá nunca las escucharon, pero a partir de la proliferación del coronavirus, la normalidad educativa cambió y obligó a tratar de reemplazar la clase presencial con las clases en línea, con muchas de estas herramientas mencionadas anteriormente.
La idea de dar este importante paso hacia las clases en línea, on line o e-learnig suena sencillo, solo bastaría tener el syllabus o diseño curricular, una laptop e internet; y transferir los conocimientos vía webinar[2]. Sin embargo, es importante analizar a los actores de este proceso de enseñanza – aprendizaje y que tan factible resulta aplicar estas clases con los estudiantes.
Nativos digitales
La expresión nativos digitales está relacionado con aquellas personas que han crecido con la web y hace un diferenciación con los “migrantes digitales” que llegaron más tarde al uso de las TIC, se puede ejemplificar con la persona que actualmente pasan los 40 años, aprendió mecanografía y para utilizar la computadora siguió un curso de computación con DOS y programas como Word Perfect, Qpro, y los nativos digitales son aquellos que nacen y saben manejar un smartphone o una computadora sin ningún curso. Desde el lado de la publicidad o marketing podríamos relacionar estos términos con la tecnología usada por Baby boomer, Generación X, millenials[3].
En teoría los nativos digitales deberían tener un mejor manejo de la tecnología; pero también se les llama “náufragos digitales”[4] porque al acceder a estos espacios por su cuenta y sin el control de los padres, principalmente por desconocimiento del uso de las mismas, ha hecho que sean nativos solo de las redes sociales, sin una guía del acceso a las TIC y poca relación de esta tecnología en el ámbito educativo.
Uso del Internet
Otro aspecto necesario para ingresar a las clases en línea, es la infraestructura, que está relacionada con poseer una computadora e internet.
Según Ecuador en Cifras, el porcentaje de hogares con acceso al internet en el área urbana ronda el 46,6% y el área rural el 16.1%; respecto al porcentaje de hogares con computadora de escritorio poseen un 24,5% con computador portátil 24,2%. Según plataforma Hoosuite[5] encargada de gestión de redes sociales, el acceso al internet es del 79% y 65% de la población posee un teléfono inteligente y accede al internet.
Con estas cifras se demuestra que un gran segmento de la población no está en las condiciones de ingresar a las clases en línea por no contar con una laptop, no tener internet o por no poseer un plan de datos que permita tener una clase desde su Smartphone.
¿Están preparados los docentes?
El primer inconveniente de las cátedra en línea se relaciona con la lógica de las clase, es decir, la planificación que desarrolla el docente a partir de su diseño curricular o syllabus, sin embargo, las clases y los recursos están concebidos y proyectados para desarrollarlos de forma presencial y no todos los docentes cuentan con conocimiento del desarrollo de clases e-learning, o b-learning[6] .
Partamos de las competencias genéricas que debería dominar un docente: dominio de su área de disciplina, seguido del pensamiento analítico, capacidad para aplicar los conocimientos en la práctica, así como adquirir nuevos conocimientos y proveer de ideas y soluciones, mencionando las más relevantes. En teoría el profesor debe estar en estas condiciones y al tono del manejo de la tecnología. Sumado a la carga administrativa, el número de niños por aula, desconocimiento de herramientas tecnológicas y el manejo psicoeducativo tanto del docente como de sus alumnos durante esta pandemia, el resultado es una ecuación que no funciona.
El Ministerio de Educación menciona que en el año 2020, se capacitan 86.915 docentes en temas como “Mi Aula en línea”, “Moodle Básico para Docentes”, “Manejo de Aulas Virtuales”, entre otros, pero existen 222.362 profesores en el territorio ecuatoriano y no sabemos en qué porcentaje dichos docentes conozcan sobre el manejo de clases on line, si disponen de computadora o de acceso al Internet.
¿La educación presencial es lo ideal?
Los diversos tipos de educación tienen sus propias características y contextos.
La educación presencial puede destacar algunos valores intangibles al tener en frente un docente como el lenguaje corporal y no verbal y los mensajes intrínsecos detrás del tono de voz, miradas o gestos; La sensación de pertenencia, de asistir a clases con el grupo y generar el sentido de compañerismo y cercanía, así como el intercambio inmediato de experiencias; Se puede agregar los costos, relacionados al mantener un espacio físico y la infraestructura necesaria para recibir las clases; Y los horarios que generan una idea de responsabilidad y cumplimiento.
En la educación en línea se valora otros contextos como la flexibilidad horaria o costos reducidos; La movilidad que está asociada a que no dependa de un espacio físico determinado; La autodisciplina, mayor compromiso y organización para desarrollar el trabajo autónomo; Un conocimiento básico en el manejo de las TIC; Y el contacto puede ser sincrónico a través de videoconferencias o chat, o bien de manera asincrónica, mediante fotos o correos electrónicos.
Entonces ¿es mejor la educación presencial o en línea?
La respuesta debería ser, depende el contexto y la necesidad.
Por ahora, la educación inicial, básica y bachillerato en su mayoría está pensada de una manera presencial, en esa medida niños y niñas manejan esa lógica y no entienden que “no estamos de vacaciones”, pues estar en casa se asocia con ese tiempo de esparcimiento, todo esto sumado el tedio a las tareas y la sobrecarga de las mismas, genera una idea equivocada de la educación en línea. El alumno no solo necesita transferencia de conocimientos sino una cercanía emocional con el docente.
Si el contexto es la falta de tiempo y necesidad de educación continua, las clases en línea son una opción y muchas universidades han implementado programas de estudios por ya varios años. La imposibilidad de compaginar un trabajo con asistencia a clases presenciales aumenta la demanda de educación semi-presencial y a distancia.
Por ahora los estudiantes se quedan sin clases presenciales y la pandemia de coronavirus hace evidente las desigualdades sociales pues no todos tienen el mismo acceso a una computadora y al internet.
Lo ideal sería que el estado entregue laptop o tablets y acceso al internet para todo el universo de estudiantes, pero esto no sucedió ni en tiempos que el petróleo bordeaba los 100 usd, peor en la crisis actual. Como alternativas se podría vincular los programas de Educa en radio y televisión; también se puede pensar en la responsabilidad social de las grandes empresas telefónicas que entreguen estos equipos y brinde, planes de datos gratuitos.
A pesar de la entrega y creatividad de los docentes todavía existen límites en el manejo de la tecnología y la normalidad en la que vivíamos ya no será la misma. Lo ideal sería no volver a la esa realidad donde se evidencia desigualdades, inequidades y conformismo. La tendencia educativa por lo digital se establece de una manera forzada, que debería quedarse y debe ser asumida como una prioridad del Estado y sus actores, con más capacitación y uso desarrollo de plataformas educativas acorde a nuestro contexto socioeducativo.
[1] Estas son las tendencias educativas que triunfarán en el 2019 https://www.educaciontrespuntocero.com/noticias/tendencias-educativas-2019/
[2] Es un neologismo que combina las palabras “web” y “seminario”. Se refiere a cualquier contenido en versión video cuyo principal objetivo sea educativo y práctico. Mediante varias plataforma Hangouts, Blubigbuttom los ya mencionados Zoom, Teams, Skype
[3] ¿A qué generación perteneces según tu fecha de nacimiento? https://www.clarin.com/entremujeres/baby-boomers-generacion-millennials-centennials-generacion-perteneces_0_ByLAxzpEW.html
[4] ¿Nativos o náufragos digitales? Los desafíos de la generación “nacida” en internet https://tecno.americaeconomia.com/articulos/nativos-o-naufragos-digitales-los-desafios-de-la-generacion-nacida-en-internet
[5] Digital 2019: global internet use accelerates https://wearesocial.com/blog/2019/01/digital-2019-global-internet-use-accelerates
[6] E-learning, M-learning y B-learning: ¿qué son y en qué se diferencian? https://www.esan.edu.pe/apuntes-empresariales/2017/07/e-learning-m-learning-y-b-learning-que-son-y-en-que-se-diferencian/
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